Liderazgo Empático: Un balance entre lo técnico y humano

Pablo Andres Velasquez Servia

noviembre 30, 2024

En los tiempos que corren el único horizonte posible para lograr grandes resultados en temas de liderazgo es liderar desde lo humano, motivando al equipo, generando confianza y haciéndolo crecer. Para lograr esto debemos de trabajar con inteligencia emocional y conectando con nuestros colaboradores. 

En este artículo te compartiremos seis variables que consideramos fundamentales a la hora de liderar equipos de trabajo, estas variables corresponden tanto al liderazgo transformacional como al liderazgo transaccional.

Es importante mencionar que si bien el liderazgo netamente transaccional es un tipo de liderazgo que está quedando obsoleto no debemos olvidar que también tiene puntos técnicos positivos y necesarios, como  lograr objetivos y cumplir procesos, estos puntos combinados con un liderazgo transformacional pueden ser la fórmula perfecta para lograr un equilibrio que nos dé como resultado un liderazgo empático capaz de conectar con la gente y lograr grandes resultados

Hablemos de las primeras cuatro variables que tienen un enfoque humano y que corresponden al liderazgo transformacional:

  1. Carisma: Es la capacidad que tiene tu liderazgo para lograr que tus colaboradores confíen en ti. Para saber si tu liderazgo cuenta con esta variable pregúntate: ¿Tu equipo confía en ti? ¿Tienen la confianza de acercarse a ti  si cometen un error o si se equivocan?
  2. Estimulación intelectual: Es la capacidad que tiene tu liderazgo para poder desarrollar espacios de aprendizaje, desarrollo y crecimiento para tus colaboradores. Para saber si tu liderazgo cuenta con esta variable pregúntate: ¿Las personas de tu equipo están en constante crecimiento? ¿Te encargas y te preocupas de generar estos espacios de aprendizaje donde ellos puedan desarrollarse tanto a nivel personal como profesional? 
  3.  Inspiración: Es la capacidad que tiene tu liderazgo de generar ambientes de trabajo positivos donde la gente disfrute lo que hace y esté motivada Para saber si tu liderazgo cuenta con esta variable pregúntate:¿Qué tipo de ambiente de trabajo existe? ¿Tus colaboradores están entusiasmados y comprometidos con lo que hacen? 
  4.  Consideración individualizada: Es la capacidad que tiene tu liderazgo de adaptar su patrón de funcionamiento al patrón de funcionamiento de tus colaboradores con el objetivo de extraer lo mejor de cada uno de ellos. Para saber si tu liderazgo cuenta con esta variable pregúntate: ¿Atiendo a las necesidades individuales de cada uno de mis colaboradores? ¿Pongo en práctica un liderazgo heterogéneo en el cual entiendo que cada una de las personas de mi equipo es distinta?

Debemos de tener en cuenta que estas variables están relacionadas entre sí, se nutren mutuamente es por ello que es necesario que nos esforcemos por desarrollar las cuatro por igual; lo que queremos decir con esto es que por ejemplo: una consideración individualizada de nuestros colaboradores acompañada de estimulación intelectual automáticamente generarán un aumento de las variables carisma e inspiración permitiéndonos alcanzar un sólido liderazgo transformacional capaz de conectar con las personas. 

Sin embargo, como ya lo hemos mencionado, estas variables no lo son todo, también debemos lograr resultados y es ahí donde entra en juego el lado técnico del liderazgo transaccional. 

En el liderazgo transaccional hay dos variables que debemos de considerar a la hora de generar un liderazgo empático capaz de cumplir objetivos en el corto, mediano y largo plazo.

  1. Recompensa contingente: Es la capacidad que tiene tu liderazgo de recompensar el esfuerzo realizado o de poner orden cuando las personas no cumplen los procesos u objetivos planteados. Para saber si tu liderazgo cuenta con esta variable pregúntate ¿Qué suelo usar cuando mis colaboradores cumplen con los objetivos planteados? ¿Los felicito? ¿Hay una recompensa? ¿Y qué sucede cuando no los cumplen? ¿Hablamos acerca de ello? ¿Generamos un plan de acción para mejorar?
  1. Dirección por excepción: Es la capacidad que tiene tu liderazgo de cumplir con los objetivos y seguir procesos, es la capacidad que tienes de que tu equipo trabaje en conseguir resultados.  Para saber si tu liderazgo cuenta con esta variable pregúntate ¿He comunicado a cada uno de mis colaboradores cuáles son sus objetivos? ¿He sido claro con los resultados que debemos lograr como equipo? ¿Me he encargado de empoderar a mis colaboradores para que puedan tomar las decisiones que consideren apropiadas en relación a la consecución de sus metas?

Las seis variables que hemos explicado aquí (cuatro de liderazgo transformacional y dos de liderazgo transaccional) deben componer nuestro patrón de liderazgo para que podamos lograr resultados a través de la conexión con las personas y viceversa.  

Recuerda, ningún extremo de liderazgo es bueno; para garantizar un liderazgo exitoso y empático necesitamos un liderazgo ambidiestro que cree un balance entre lo humano y lo técnico.

El equilibrio es clave, el enfoque en la gente y en los resultados es clave. 

 TODOS TENEMOS QUE ESTAR BIEN Y A LA VEZ TODOS TENEMOS QUE LOGRAR RESULTADOS.

Pablo Andres Velasquez Servia

Pablo Andres Velasquez Servia

Conferencista y facilitador con más de 14 años de experiencia en temas relacionados a transformación cultural, liderazgo, neurociencias e innovación; habiendo capacitado hasta la fecha a más de 18500 personas en distintas empresas nacionales e internacionales. Es Director General en Talentum.

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